viernes, 25 de enero de 2008

Sun Tzu dice... y se acabó el pastel, pero ¿como poner otro?

Sun Tzu es junto a Clausewitz el más citado de los pensadores militares (personalmente también incluiría a Vegecio, pero este pobre romano es más desconocido) una de sus citas más curiosas (y menos dichas) es la siguiente: LA ESENCIA DEL ARTE DE LA GUERRA ES EL ENGAÑO.
Llevamos unos cuantos días con un continuo goteo de informaciones sobre la ilegalización de ANV y PCTV. Ahora hay pruebas dicen... , cuando sin embargo esas pruebas en el caso del PCTV existían desde hace al menos 3 años en un informe de la Guardia Civil de 80 páginas y que el gobierno se negó a leer; y en el caso de ANV se saben sus relaciones con ETA al menos desde abril de 2007, y lo que es peor: le fue sugerida esta franquicia a ETA por el propio gobierno ¿Cómo no van a saber que está relacionada con ETA?. Sumemos a todo esto el hecho de que el p$oe y sus amigos se han negado por cuatro veces, cuatro, a ilegalizarlos a peticiones del PP. ¿Cuál es el hecho diferencial? Muy simple: hay elecciones en marzo y quiere Judas y sus compinches blanquearse un poquito, envolverse (no mucho no les vaya a dar urticaria) en la bandera nacional y arañar algún voto. Esta es la explicación benévola. La malévola es que vista la actuación de Garzón y Pedraz ayer, es que no ilegalicen ni a uno ni a otro. El Tribunal Supremo prevarique por enésima vez y diga que no que son legales, así darán gusto (o eso creen) a ETA legalizando (o haciendo muy dificil su posterior ilegalización) sus brazos político-económicos (son su principal fuente de ingresos gracias a nuestros impuestos) y además decir: "Nosotros hemos querido, pero los jueces y la ley no nos han dejado". Ya se sabe "El elemento esencial del Arte de la Guerra es el engaño" y para ellos estamos en una guerra, entre España y los que como esta panda de Don Julianes de pacotilla quieren destruirla.
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Bien, hoy se ha sabido que el paro se ha incrementado en 117.000 personas el año pasado. Jesús Caldera, uno de los compinches de Judas, se ríe. El tiene el puesto asegurado a los demas y a la plebe que les den..., pero ¿Cómo cambiarlo?.
Este es el problema y alguna solución hay, entre ellas:
  1. Rebajar los impuestos. El que mejor sabe como utilizar su dinero es el propio contribuyente. Al haber más dinero en manos de los consumidores el consumo se incrementará con lo que la actividad económica se mantendrá y además, tal y como se ha demostrado ampliamente, la recaudación subirá. Pero explicale esto a un sociata.
  2. Recortar el gasto público. Por dos razones: la primera para reducir la inflación al disminuir la necesidad de financiación del sector público y además reducir posteriores incrementos y la segunda para lograr un superhabit que nos permita un margen de maniobra ante la crisis y recuperar con el tiempo las reservas de oro y divisas que con una alegría, irresponsabilidad y de forma traicionera (cuando no como auténtica traición) se han pulido esta panda.

Estas serían medidas económicas hay otras que iré desgranando con el tiempo tanto económicas como de otro tipo.

Hasta la vista y a por ellos. Son pocos, cobardes y además no tienen razón.

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