miércoles, 9 de abril de 2008

El Partido Campesino.

En los paises del antiguo Pacto de Varsovia había una serie de partidos que, tolerados por los comunistas, ayudaban a hacer el paripé de una presunta democracia. Había el simulacro de elecciones, ganaba el Partido Comunista -como quiera que se llamara- y el resto aceptaban que el asunto había sido limpio y actuaban como si lo fuera. Naturalmente si había alguno que quería hacer algo más que perder siempre y levantaba la voz... desaparecía, en ocasiones en un sentido literal y en otras simplemente se le aislaba.
El debate de investidura ha sido, en gran parte, la escenificación de la creación de un Partido Campesino (este era el nombre que el partido tolerado tenía en Polonia). Rodriguez ha dicho lo de siempre, tan campanudo y pomposo como siempre y tan vacío intelectual y doctrinalmente como siempre. Pero lo peor ha sido el de la barba. Se ha tragado todo lo que decía el otro, ha dado confianza a un tío que ha mentido como un bellaco durante cuatro años, que ha disparatado en economía y nos está llevando a una crisis de la que quizá no salgamos en décadas, que ha querido rendir la nación a un grupo terrorista y que está entregando la soberanía nacional por fascículos gentuza que odia España, que tolera la desigualdad entre españoles y permite que en un tercio del territorio nacional no se puede estudiar en la lengua oficial de la Nación (que hablan cuatrocientos millones de personas), que beneficia con un 60% de la inversión a dos regiones que han sido sus caladeros de votos y que ha garantizado inversión en infraestructuras a otra en detrimento de las demás durante siete años. Pero lo peor de todo ha sido que ha dado la impresión de haber cambiado el sentido del voto a última hora presionado por la posibilidad de un rival a su liderazgo... liderazgo ¿de qué Sr. Rajoy?, si Ud. ya esta políticamente muerto y no se ha enterado y además ha matado al partido de la esperanza si Esperanza no lo remedia.
Pero no desesperemos. Siempre nos queda Rosa.

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Un dato para los escépticos: la renta bruta familiar es de 625 mil millones de Euros y los 400€ que nos va devolver via retenciones apenas son 5000 millones o sea el chocolate del loro.
Hasta la vista y a por ellos. Son pocos, cobardes y además no tienen razón.

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