miércoles, 24 de septiembre de 2008

¿Pasarela Auschwitz? ¿Biafra fashion? ¿De qué van?

Pedro Pablo Rubens fue un gran pintor. En la práctica la gran figura del Barroco. Uno de sus cuadros es Las Tres Gracias. Uno podría pensar que ese festival de carne era propio de una mente un poco enfermiza, pero la verdad es que ese tipo de enfermedad debía de estar muy generalizado en su tiempo. Todavía tengo que ver a una a la que se le noten los huesos en un cuadro de la época... salvo que represente a la muerte. Otro ejémplo, nuestro Velázquez. Alguien ha visto Venus en el espejo, desde luego es cualquier cosa menos delgada. Vamos que es un festival al lubidrio, igual que las de Rubens. No es mi intención demostrar que los pintores del Barroco (o de cualquier otra época, pero esa en arte es mi debilidad) eran una cuadrilla de erotómanos enloquecidos, ni mucho menos, sino algo más actual.


Llevamos ya bastante tiempo, por no decir demasiado, con un extraño culto, no al cuerpo, sino al famelismo generalizado. Si alguien quiere morirse de hambre, me parece estupendo, pero que no arrastre al resto del mundo con él o ella. No es que vaya a proclamar las bondades de la gula, pero de ahí a la de un régimen salvaje va un abismo. Pero lo peor viene a la hora de comprar la ropa: en tallas femeninas es casi imposible encontrar tallas superiores a la 48 en tiendas digamos "normales". La razón se me escapa, entre otras cosas porque resulta que la talla 48 y más es la más habitual, entre el sexo femenino hispánico. Pero lo que ya resulta absolutamente chocante, es el hecho disparatado de que las tallas de sujetador en algunas tiendas no pasan de la 85..., cuando resulta que muy pocas tienen tan poco pecho. Parece como si las empresas dedicadas a la moda femenina no viviesen de vender ropa, porque... ¿a quién cojones la venden?. Luego resulta que llega la típica niña de 16 ó 17 añitos y no encuentra ropa de su talla, y hala ¡¡a régimen que estoy como una foca!!, y así empieza la anorexia... que todos dicen aborrecer ¿Cómo van a aborrecerla si las modelos lo son? En ocasiones son tan delgadas y llevan unos trapos tan horrorosos que parece que los diseñadores se estén burlando de las mujeres, que las humillen ¿Alguno de vosostros ha visto mujeres con las transparencias de algunos desfiles? Yo si: en los clubes de alterne o en la actuación de alguna cantante tronada, pero por la calle no ¿Qué pretenden entonces? ¿Qué se esté más preocupado de nuestra apariencia física? ¿De ser aceptados por el grupo, algo que no es posible si eres digamos fuerte? Explicale a una niña de 16-18 años que en las pelis porno no hay famélicas y si tías ebúrneas y neumáticas, no te hará ni caso. Pues algo así debe ser, porque hay que ver los maullidos de indignación que se oyeron cuando la Paserela Cibeles dijo que no admitiría modelos anoréxicas.
Uno, de natural malicioso, no cree en las conspiraciones, pero a veces casi parece que las hay.
Otro día más.
A por ellos. Son pocos, cobardes y además no tienen razón.

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